Sobre el estómago, coloca las manos bajo los hombros y levántate en postura de cobra con los brazos extendidos, la espalda arqueada y la cabeza hacia atrás. Golpea los glúteos alternadamente con los talones, más rápido de lo que creas poder, por un minuto. Relája un minuto.

En cuclillas en postura de rana, los talones levantados del piso y tocándose, coloca los brazos entre las piernas directamente bajo los hombros con las yemas de los dedos sobre el piso. No alteres la posición de los brazos durante el ejercicio. Inhala levantándote despegando las manos del piso, manteniendo los brazos estirados, ensos y en el mismo ángulo que el cuerpo; exhala al bajar. Continúa en un ritmo constante y contínuo por 2 a 3 minutos y procede inmediatamente al siguiente ejercicio (para la digestión).

Continúa como en el ejercicio 2 pero con los brazos cruzados sobre el pecho, al estilo de un jefe indio, por 2 a 3 minutos (para la energía sexual), y procede inmediatamente al siguiente ejercicio.

Continúa como arriba, pero con las manos en cerradura de Venus (dedos entrelazados, palmas hacia abajo) sobre la cabeza, por 2 a 3 minutos (para el sistema nervioso) y procede, sin pausa, al siguiente ejercicio.

Párate derecho/a, los pies a unas cuantas pulgadas extiende ambos brazos hacia afuera con un pequeño ángulo hacia adelante. La mano izquierda se mantiene justo bajo el nivel del hombro y la derecha ligeramente arriba y un poco más alejada del cuerpo que la izquierda. Relaja las manos y deja que el balance llegue, sintiéndote fuerte y con aplomo. Levántate sobre las puntas de los pies dejándolos en el mismo lugar y gira ligéramente 1/5 a la derecha (girando desde la cintura) y baja los talones al piso. Repite 4 veces más regresando al centro. Invierte el movimiento 5 veces hacia la izquierda para terminar en la postura original viendo al frente. Continúa con otro circuito en la misma dirección. Repite desde el principo manteniendo el balance magnético de las manos, moviéndote despacio con control y una mente meditativa, como una devoción que se convierte en danza, moviéndote de lado a lado con los ojos cerrados, 4 a 5 minutos.

En cuclillas con los pies separados 2-3 pies, de manera que los muslos estén paralelos al piso, como si estuvieras sentado/a en una silla. Dóblate hacia adelante ligeramente desde la cintura, extendiendo los brazos hacia abajo y hacia el frente en el mismo ángulo que las piernas, los codos sobre las rodillas, los antebrazos a 120 grados de la parte superior de los brazos, las palmas viendo hacia abajo. Empieza a rebotar hacia arriba y hacia abajo desde las rodillas mientras giras desde la cintura de lado a lado, haciendo varios rebotes para voltear a cada lado, los brazos moviéndose junto con el torso; enfoca los ojos en el 3er ojo, por 2-3 minutos. Es como bendecir a la tierra, un movimiento básico de las danzas indias.

Párate sobre el pie izquierdo sin doblar la rodilla. Extiende la pierna derecha hacia el frente, paralela al piso, tomándola del tobillo derecho con ambas manos, inclinándote ligeramente hacia adelante de la cintura pero manteniendo la espalda recta, y mantente ahí por 2-3 minutos concentrándote en el 3er ojo. Esto se llama kundalini Praan Dandh.

Párate con los pies bien abiertos, coloca las manos juntas en cerradura de Venus y levanta los brazos hacia la derecha; balancéalos hacia abajo poderosamente como si fueras a pegar con un hacha, y continúa estirando los brazos hacia arriba a la izquierda y de regreso. Mantén el movimiento golpeando con fuerza hacia uno y otro lados por 2-3 minutos. Luego relájate de 10 a 15 minutos en postura de muerto o en postura fácil.